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El fin de curso normalmente es una locura en cualquier casa pero en esta es un caos... #Ganso ha aprendido que un mes son 30 días y que pasan volando y se le han acumulado las tareas, #BabyPepo cada vez trae mas dictados para hacer en casa y estamos empezando a redondear la letra, #BabyCoco esta emocionada por su cumpleaños y esta emperrada que quiere una fiesta de pijamas (a ver que me invento), y #BabyInes gatea como una campeona y ya si que es un peligro porque llega a todo... y mientras yo el blog empantanado, he comenzado 1000 veces a escribir esta entrada y ya casi en vez de ser los dos meses son los tres, pero bueno quiero contar mi cambio...

Cuando comencé fue una decisión dura, me había acomodado al dolor de rodillas, a que los pantalones me hiciesen rozadura y a llorar cuando tenía valor de mirarme al espejo antes de ducharme. A día de hoy, no he podido hacer el álbum de fotos del bautizo de la peque porque me doy autentico asco, y lo peor es que yo me engañé a mi misma ese día diciéndome que estaba preciosa, pero realmente no era así, solo quería creerlo.

Ahora que miro como fue todo desde que dí a luz, veo que aunque de manera inconsciente, había dejado de salir, porque me daba vergüenza que vieran a mi marido conmigo, salir a la calle algo mas arreglada me suponía un ataque de ansiedad que además era incomprendido por la gente que me rodeaba, para ellos siempre decía no a todo, pero en realidad es que enfrentarme ¿al que me pongo? era una tortura, que al final acababa con mis vaqueros premamá y mis deportivas dadas de si, porque eran las únicas que me valían. Mi peso me ha llevado a distanciarme de mi marido por avergonzarme de mi aspecto y a que mis hijos me vieran mas veces triste que contenta, aunque también es verdad que delante de ellos, incluso de mi marido y de mis familiares y amigos, he hecho de tripas corazón he intentado sacar una sonrisa incluso riéndome de mi misma y de mis lorzas.

Han pasado dos meses ya, y he perdido mas de 12 kg de peso, volumen, he ganado masa muscular, pero también he ganado sonrisas, energía y ganas de que el cambio sea definitivo. Hace dos semana he introducido el ejercicio diario de unos 30 minutos mas los paseos con #BabyInes que a buen ritmo suelen ser de 6 a 8 km. Poco a poco voy subiendo la intensidad de los ejercicios y lo mejor es que mi cuerpo responde, las rodillas han dejado de sonar a valla oxidada cada vez que subo las escaleras y mi frecuencia cardíaca ya no se dispara en el primer movimiento. Sigo odiando el deporte, sigo prefiriendo un buen sillón con su mantita, pero es necesario y a ver si antes de mis 40 puedo completar alguna carrera de 5 km.

La cuestión de la comida es la que mejor llevo porque es muy fácil. Cuando decidí escoger Herbalife fue por una cuestión de comodidad porque podía comer de todo, era cuestión de unos batidos y unos tés, y aunque esto es así tomo mi té y mi batido por la mañana, y mi batido por la noche, me he acostumbrado a comer un pisco por la mañana y otro por la tarde con un té, frió o caliente según me apetezca,y he ordenado las comidas y las hago proporcionada... comer cada 3 horas me permite no tener hambre y que el goloseo de ir a la cocina cada 15 min se haya cortado de raíz. Mucha gente me pregunta si no me aburro comiendo de dieta, y mi respuesta es que NO, pero así con mayúsculas, porque no como de dieta como equilibrado con todo tipo de ingredientes y me ha llevado a descubrir que el horno es un gran aliado. Yo disfruto cocinando, me relaja y en la cocina me siento genial, y ahora tengo que investigar nuevas formas de introducir ingredientes aburridos de manera que no sólo sean apetecibles para mí, si no también para los canijos. Porque estos enanos comen por los ojos, pero además no es por echarme flores pero están buenísimos los inventos de "la Mari".

Para hacerse una idea del cambio he comparado dos vaqueros, el que llevaba el 6 de enero que me hizo una herida en la cadera y el que me puse ayer, son una 46 (que reventaba) y una 42 de talle bajo que me queda perfecta. Pero el cinturón por ejemplo es que no podía abrochármelo, y empecé a usarlo a las 2 semanas de dieta, y ahora ya he bajado 3 agujeros.

En cuanto al volumen, son 55 cm en total y sin mucha flacidez, y ese era un temor que tenía ante la perdida de peso que quería hacer, porque que todo vuelva a su sitio es muy dificil.

	18/01/18	21/03/18
Pecho	93	86	- 7 cm
Cintura	90	82	- 8 cm
Ombligo	110	93	- 17 cm
Cadera	121	108	- 13 cm
Bajo Culo	116	106	- 10 cm
			55 cm de volumen

Se que voy a tener algún bajón donde la báscula no me buenas noticias, pero creo que poco a poco me estoy haciendo mas fuerte y conociendo mejor como responde mi cuerpo según mis hábitos y lo más importante mis hijos me necesitan sana y mi marido me quiere con 100 o con 70 kg pero me quiere feliz. Tengo 234 días para evolucionar y convertirme no en mejor persona, porque no creo que sea mala, pero si en una persona más feliz y con fuerzas para ayudar a los míos y a quien me necesite.

Por último, estas semanas han sido un poco grises en este país y no sólo por este invierno sin fin, que va a llegar antes la última temporada de Juego de Tronos que el fin del invierno, pero hay un "pececillo" en el cielo porque una injusticia de celos e intereses de adultos que no tiene ningún sentido, y desde aquí como madre divorciada sólo pido que nos fijemos en lo que nos dicen los niños, en como actúan, que una foto o una entrevista adoctrinada no sirva para decidir con quien va a estar mejor un pequeño, porque ellos son más listos que nosotros y su lucha por sobrevivir y ser queridos por ambos padres les lleva a aprender decir lo que cada adulto quiere oír. Sigue nadando pequeño pececillo D.E.P.